Ruinas del Monasterio de Bonaval
Una maravilla de la arquitectura cisterciense en Guadalajara
En un angosto valle, drenado por un joven río Jarama, se encuentran las impresionantes ruinas del Monasterio de Bonaval. Este cenobio fue fundado por el rey de Castilla, Alfonso VIII en el año 1164, que lo donó a la poderosa Orden del Císter.
Las ruinas medievales están datadas entre los S. XII y XIII. Entre sus elementos más interesantes debe citarse la cabecera tripartita en la cual se pueden apreciar unas magníficas ventanas decoradas con puntas de diamante, ornamentación tratada con profusión en el ámbito de la arquitectura bernarda.
También es de interés el transepto meridional que abre una bellísima portada con capiteles decorados con temas vegetales.