La más célebre de las obras del estilo Gótico Isabelino
El Monasterio de San Juan de los Reyes, Toledo
El estilo Gótico Isabelino es el producto de una mezcla de influencias y tradiciones artísticas que se fusionaron en la Península Ibérica durante este período. Si bien el Gótico ya había llegado a España en el siglo XIII. Durante el reinado de los Reyes Católicos, experimentó un renacimiento y evolución notable.
Una de las principales influencias fue el estilo flamígero gótico procedente de los Países Bajos y de Borgoña, que se caracterizaba por sus intrincadas tracerías y una ornamentación profusa. Esta influencia se mezcló con la tradición gótica española existente y con el arte mudéjar, creando un estilo único y distintivo.
El Gótico Isabelino se reflejó principalmente en la arquitectura religiosa, aunque también influyó en otras formas de arte. Las iglesias y catedrales de este período se destacaron por su uso elaborado de tracerías, que eran las intrincadas formas geométricas utilizadas en las ventanas y paredes. Estas tracerías solían ser tan complejas que se asemejaban a llamas de fuego o flores en pleno florecimiento, de ahí los nombres alternativos del estilo.
Monasterio de San Juan de los Reyes, Toledo
Un ejemplo emblemático de esta arquitectura es el Monasterio de San Juan de los Reyes. Se trata de uno de los grandes hitos arquitectónicos de la ciudad de Toledo. Sus obras fueron encargadas por los Reyes Católicos al arquitecto Juan Guas, el cual construyó una de las obras más interesantes del gótico hispano-flamenco.
Su iglesia consta de una nave y colaterales entre los contrafuertes, en ella hemos de destacar la sorprendente decoración que encontramos en el crucero y en la Capilla Mayor, en donde proliferan los arcos conopiales y los escudos de los Reyes Católicos que se sustentan mediante las águilas de San Juan.
Mediante la llamada Puerta de la Verónica se accede al flamante Claustro, formado por cuatro crujías abiertas a un patio. En la planta superior del claustro destaca el magnífico artesonado que está decorado con emblemas de Isabel y Fernando.