Visita 10 Colegiatas de España levantadas en la época románica

Una colegiata consiste en una iglesia que sin ser sede episcopal posee un cabildo o colegio, compuesto de abad ( también llamado deán o prior) y de canónigos seculares. Existen diferentes tipos de colegiatas, algunas de ellas se aproximan a la importancia de las catedrales al contar con jurisdicción episcopal, en otras, su prelado no posee tal jurisdicción. En este especial artístico te presentamos 10 colegiatas de España que merecen una detenida visita

Santa María la Mayor de Toro es una de las más ilustres colegiatas de España debido a su espléndida arquitectura. Esta iglesia colegial es erigida entre los años 1160 y 1240 por orden del rey Alfonso VII. Posteriormente, es elevada a la categoría de colegiata por iniciativa de los Reyes Católicos. Desde un punto de vista artístico, la sorprendente Portada de la Majestad es uno de sus elementos más interesantes debido a sus proporciones y a la magnífica escultura que presenta.

También destaca por mérito propio la portada que se abre en el ala septentrional del conjunto en la que podemos deleitarnos con un grupo de músicos que aparecen en una de sus arquivoltas. Aunque es su glorioso cimborrio el que da fama a la colegiata, el cual parece recoger la influencia del Poitou. En la fotografía de arriba contemplamos la Colegiata de Toro desde el llamado Paseo del Espolón, en este punto se contempla perfectamente el maravilloso juego de volúmenes que causa esta imponente iglesia. Muy cerca de aquí se encuentra el mirador que nos ofrece unas bellísimas vistas del río Duero.

El origen de la Colegiata de San Pedro de Cervatos se remonta a nada menos que el S. IX, momento en que estas tierras quedaron protegidas de los dominios islámicos al quedar repoblado el entorno de Amaya, situado a 45 km al sur de Cervatos. La Colegiata de Cervatos está considerada como una de las obras capitales del románico de Cantabria y por extensión del románico español. Esta icónica iglesia transmitió una gran influencia que a día de hoy se puede comprobar en un buen número de templos cántabros, burgaleses y palentinos.

La Colegiata de San Pedro de Teverga está considerada como el primer templo de estilo románico que se levantó en toda Asturias. El edificio actual todavía conserva elementos arquitectónicos que podrían estar fechados entre los años 1036 y 1076. El origen de la Colegiata de Teverga hay que encontrarlo en un monasterio benedictino, por otro lado, su iglesia fue elevada a colegiata en el año 1149 con canónigos que dependían de la seo ovetense.

Bien es sabido que el norte montañoso de la provincia de Palencia atesora la mayor concentración de templos románicos de todo el Mundo. Sobre estas iglesias de porte coqueto y rústico parecen arrimarse sencillas poblaciones de carácter serrano que causan una gran sensación de encanto para el viajero romántico, o mejor dicho románico, que busca impresiones de tiempos pasados.

Entre este inmenso y valioso inventario de iglesias románicas que constelan la Montaña Palentina encontramos la antigua Colegiata de San Salvador de Cantamuda, quizá la más fotogénica de todas ellas, se mire por donde se mire, da igual contemplarla desde poniente y maravillarnos con su espadaña, que irnos al otro extremo y observar su cabecera.

Castrojeriz es uno de los grandes hitos del Camino de Santiago a su paso por la provincia de Burgos. En esta población de origen antiquísimo hallamos la Colegiata de Santa María del Manzano que se yergue en la parte occidental del pueblo junto al Camino Francés. El edificio actual es una compleja y dilatada obra a lo largo del tiempo, cabe mencionar que fue levantado sobre una iglesia del S. X. Una de las vistas más impresionantes del conjunto arquitectónico se obtienen desde poniente, en donde podemos apreciar una majestuosa fachada presidida por un gran rosetón.