Real Colegiata de San Isidoro de León

Real Colegiata de San Isidoro

Una de las maravillas del románico español

Este majestuoso templo está considerado como una de las grandes cimas del románico hispano, esta obra evidencia la gran prosperidad que vivió el Reino de León en el medievo. Anteriormente a la colegiata existió un antiguo monasterio dedicado a San Pelayo que fue mandado construir en el año 966 por el rey Sancho I de León, llamado el Craso.

La Colegiata de San Isidoro de León es románica en su mayor parte, de la antigua iglesia que fue levantada por el rey Fernando I y consagrada en el año 1063 a los pies de la actual, sólo conserva el nártex, llamado actualmente Panteón de los Reyes, consiste en un recinto rectangular que presenta tres naves que se cubren mediante bóvedas de arista que se sustentan en pilares de medias columnas que lucen unos bellísimos capiteles.

Las bóvedas y muros del panteón están decorados con unas excelsas pinturas románicas que fueron realizadas en el S. XII. Entre los años 1072 y 1101 se levantó un nuevo templo, la actual Colegiata de San Isidoro, ello fue debido gracias al interés de Doña Urraca que quería ampliar el templo donde descansaban los restos de sus padres. La iglesia consta de planta de cruz latina tres naves, la central se cubre mediante bóveda de cañón y las laterales con bóvedas de arista.

Los arcos del crucero son polilobulados lo cual evidencia el influjo del arte islámico. Aquí también encontraremos capiteles de gran belleza e interés, en el altar mayor se encuentra una urna de plata en la que se conservan los restos de San Isidoro que fueron traídos desde la ciudad de Sevilla en el año 1063, año de consagración del antiguo templo.

Portadas:

En el exterior del edificio hemos de destacar sus dos magníficas portadas de estilo románico. La primera es conocida como la Puerta del Cordero que guarda una gran relación con uno de los talleres escultóricos que trabajaron en la Catedral de Santiago de Compostela, en su tímpano se representa el Sacrificio de Isaac y en la parte superior el «Agnus Dei» dentro de una mandorla que la sujetan dos ángeles, en la portada también se representa un Zodiaco, el rey David con sus músicos, San Pelayo y San Isidoro.

La otra portada recibe la denominación de Puerta del Perdón, ésta es algo posterior en el tiempo a la anterior y nos recuerda al ingreso de la nave lateral sur de la Basílica de San Saturnino de Toulouse, conocida como la Puerta Miègeville. En la Puerta del Perdón se representa la Muerte, Resurrección y Ascensión de Cristo.

El imafronte de la colegiata fue reformado en el S. XVI. Son de interés también los dos claustros, uno de ellos corresponde al S. XVI y presenta una galería de estilo románico, el otro claustro es de estilo barroco y su construcción se remonta al S. XVIII.