Monasterio de Santa María de L’Estany

Monasterio de Santa María de L'Estany

Vista del claustro del Monasterio de Santa María de L'Estany, El Bagés, provincia de Barcelona

Este fascinante cenobio se halla situado en L’Estany, localidad barcelonesa de aproximadamente 400 habitantes que se encuentra ubicada en la parte septentrional de la Comarca del Moianès, dentro de un pintoresco valle que contaba con aguas estancadas, las cuales dieron nombre al monasterio y a la población. En este lugar se estableció una comunidad de Canónigos Regulares de San Agustín. El obispo Berenguer de Lluçà, designó en calidad de prior de L’Estany a Bernard (año 1099) que también estableció otra comunidad de canónigos en Santa María de Manresa.

Con el tiempo, la comunidad monacal de L’Estany fue prosperando, ello fue debido, entre otros motivos, a su posición geográfica ya que este lugar se encuentra muy cerca de la confluencia de varias comarcas que en aquella época con sus respectivos señores favorecieron la bonanza del monasterio. Una vez consolidada la posición económica se erigió una nueva iglesia en estilo románico con amplia nave longitudinal, transepto y cabecera tripartita, el cimborrio se elevo sobre el crucero y sirvió de base para una torre de forma prismática que fue dañada en un terremoto que aconteció la noche del 24 mayo de 1428.

La consagración de esta iglesia tuvo lugar el 3 de noviembre de 1133 por Ramón Gaufred, obispo de Vic; San Oleguer, arzobispo de Tarragona y Berenguer Dalmau, obispo de Girona. La pujanza económica del monasterio se mantuvo hasta ya entrado el S. XIV. A partir del S. XV comenzaría un período de decadencia que culminó a finales del S. XVI, momento en que el Papa Clemente VIII, a instancias de Felipe II suprimió la canónicas agustinianas en su reino. El monasterio quedó convertido en colegiata hasta el año 1775 cuando pasó a ser la parroquial de L’Estany.

Descripción:

Del período medieval, el Monasterio de Santa María de L’Estany conserva la iglesia y su maravilloso claustro, ambos de estilo románico. La iglesia consta de planta de cruz latina con nave única pero espaciosa formada por un total de tres tramos, transepto y cabecera tripartita como hemos indicado anteriormente. Hemos de comentar que los absidiolos fueron reconstruidos en el S. XX según el modelo original. La nave se cubre mediante bóveda de cañón ligeramente apuntada y los ábsides hacen lo propio con bóvedas de horno.

El ingreso al templo se encuentra en la fachada que mira hacia poniente, consiste en una portada muy sobria formada por un arco de medio punto dovelado, el conjunto queda coronado por un rosetón gótico que se encarga de iluminar el interior del templo.

El claustro concentra gran parte del interés artístico del monasterio, es de una gran belleza y además está considerado como uno de los claustros mejor conservados del románico catalán. Dicho claustro se localiza junto al muro meridional de la iglesia, presenta planta cuadrangular, cada galería suma 9,80 metros de longitud y presenta diez arcos de medio punto que se apean en columnas de fuste cilíndrico y que se coronan con interesantes capiteles historiados. Las obras del claustro comenzaron a mediados del S. XII y no finalizaron hasta ya comenzada la centuria siguiente. Hemos de destacar que los capiteles presentan un magnífico estado de conservación y lucen un variado repertorio iconográfico en donde pueden contemplarse escenas bíblicas, paganas y un buen número de seres del bestiario medieval.

Fotos del Monasterio de Santa María de L’Estany