Ermita de San Juan de Amamio

Ermita de San Juan de Amamio

Vista del ábside y del ala septentrional de la ermita de San Juan de Amamio, Araia, Álava-Araba

El territorio de Álava ofrece una extraordinaria abundancia y variedad de románico, prueba de ello es la Ermita de San Juan de Amamio, un templo de pequeñas dimensiones pero no exento de belleza e interés.

Encontrar esta ermita no supone dificultad alguna, se halla situada muy cerca de la población de Araia (Municipio de Asparrena, Cuadrilla de Salvatierra-Agurain), hay indicaciones y desde la lejanía se intuye la silueta de la iglesia. La ermita se alza solitaria en una ladera de la Sierra de Entzia desde donde se obtiene un amplio panorama de la Llanada Alavesa.

Araia, punto de referencia para dirigirnos hacia la Ermita de San Juan, se encuentra a una distancia de 37 km al este de Vitoria-Gasteiz y a tan solo 10 km de Zalduondo, interesante hito jacobeo y monumental.

Descripción de la obra

La ermita de San Juan de Amamio es el único vestigio que se conserva de la desaparecida población de Amamio, núcleo que aparece mencionado en un documento del S. XI perteneciente a la Reja de San Millán de la Cogolla. Por lo tanto, la ermita de San Juan, fue la parroquial de dicha localidad.

Se trata de un templo de estilo románico formado por una sola nave longitudinal de forma rectangular que se cubre mediante techumbre de madera. Aunque hemos de mencionar que en su origen presentaba bóveda de medio cañón. Dicha nave, desemboca en un testero rectangular.

El único ingreso se sitúa en el lado de la Epístola, se trata de una sencilla portada formada por un arco de medio punto. Los muros norte y sur conservan una secuencia de canecillos, algunos de ellos decorados con diversos temas, sobre los que se sustenta una cornisa con ajedrezado. El edificio se apareja mediante sillares de considerable tamaño y bien escuadrados.

Capítulo aparte merece la ornamentación escultórica que hace acto de presencia en los capiteles de la ventana del ábside y de manera especial, en los que se encuentran en el interior del templo, uno de ellos nos ilustra con el tema del avaro en donde no falta la pertinente bolsa que es el atributo que permite identificar esta recurrente iconografía.

Por último y, a modo de corolario, podemos considerar esta ermita como uno de los mejores ejemplos para entender como fue el románico alavés de mediados del S. XII. Ello es debido a que prácticamente su fábrica apenas ha sufrido modificaciones que alteren su primitiva fisonomía.

Fotos de la Ermita de San Juan de Amamio, Araia