Anfiteatro Romano

Anfiteatro Romano

Mérida, provincia de Badajoz, Extremadura

Anfiteatro romano de Mérida

Antes de la existencia de los primeros anfiteatros romanos, los espectáculos sangrientos se desarrollaban en los circos. El anfiteatro era un edificio similar a las actuales plazas de toros, sin embargo la planta de éstos tenía forma elipsoidal. El primer anfiteatro de la historia se erigió en el año 29 a. C., en la ciudad de Roma. Después todas las ciudades importantes y de provincias contaron con su propio anfiteatro, tal es el caso de los ejemplos de Itálica, Nimes, Tarragona o el de Mérida que podemos contemplar en la fotografía. Éste último fue inaugurado en el año 8 a. C. y su construcción fue simultánea a la del teatro que se encuentra a escasos metros.

El anfiteatro de Mérida tenía una capacidad aproximada para 14.000 espectadores, su uso se fue perdiendo con la llegada del cristianismo y en el S. IV quedó abandonado. Los espectáculos que se celebraban en estos recintos eran los «Munus gladiatorum» o luchas de gladiadores, éstas fueron introducidas en el año 264 a. C. y procedían de los antiguos pobladores de la península itálica.

Los gladiadores solían ser prisioneros de guerra, criminales sentenciados, esclavos y con el tiempo hombres libres que hacían de la lucha una profesión.

Otros espectáculos sangrientos que se celebraban en el anfiteatro eran las luchas entre jinetes y carros de guerra o las famosas naumaquias para las que se creaban grandes estanques inundando la arena. Las luchas con fieras no llegaron a Roma hasta el año 168 a. C., éstas sucedieron a las cacerías y combates de hombres contra animales.

Fotos del Anfiteatro Romano