Sirena, Bestiario Medieval

Sirena, Bestiario Medieval

Iglesia de San Claudio de Olivares, Zamora

Sirena, Bestiario Medieval y representación en el arte:

Homero describía a las sirenas como figuras con cuerpo de pájaro y cabeza de mujer,En la Edad Media se empieza a representar las sirenas como mujeres hermosas con cola de pez también las citó con cuerpo y cabeza de mujer con extremidades de ave. Las sirenas han aparecido representadas en esculturas funerarias para recordar al esparaván egipcio, símbolo del alma del difunto. En las pinturas de vasos suelen aparecer tres sirenas. Posteriormente en la Edad Media y, principalmente en el arte románico, se empiezan a representar las sirenas como mujeres hermosas con cola de pez. Esta última forma ha pasado a ser la usual para describir a este ser fantástico.

En el bestiario medieval las sirenas vienen a representar de manera básica la incitación a los pecados carnales, por lo tanto, en el medievo tuvo una connotación eminentemente negativa a diferencia con la época antigua.

Sirena en la iglesia zamorana de San Claudio de Olivares:

La sirena que vemos en la fotografía está representada con cuerpo de mujer y cola de pez, podemos observar como se coge con la mano derecha la cola y con la izquierda la coleta del pelo. Dicha sirena se encuentra situada en uno de los capiteles del presbiterio de la iglesia de San Claudio de Olivares, una de las numerosas joyas románicas de la ciudad de Zamora.

San Claudio de Olivares se encuentra ubicada junto a la orilla derecha del río Duero, muy cerca del famoso puente románico que salva su cauce y de la legendaria Casa del Cid, donde según cuenta la tradición, habitó el Campeador con la infanta Urraca, bajo la vigilancia del alcaide Arias Gonzalo. A esta época corresponde la parte más antigua de la iglesia de San Claudio de Olivares.

En el momento de su construcción y en el período de apogeo de Zamora, esta iglesia no era más que una modesta ermita de arrabal, formando un pequeño caserío al que posteriormente dio su nombre. San Claudio de Olivares presenta planta rectangular con una sola nave rematada por un ábside semicircular. En su interior atesora un magnífico repertorio escultórico, en el exterior destaca su sobrio ábside y una magnífica portada abierta en el muro septentrional, la cual cuenta con uno de los mensarios más interesantes de nuestro románico junto con los de Campisábalos o Beleña de Sorbe en Guadalajara.

Álbum fotográfico: