Monasterio de San Juan de la Peña

Real Monasterio de San Juan de la Peña

Vista del Claustro del Monasterio de San Juan de la Peña, Comarca de la Jacetania, provincia de Huesca

Este magnífico cenobio es uno de los grandes hitos artísticos e históricos del antiguo reino de Aragón, las montañas que circundan al antiguo cenobio sirvieron de cobijo a los cristianos refugiados que procedían del entorno del Ebro, éstos encontraron aquí la defensa y también la independencia frente los dominios islámicos, este contexto se sitúa entre los S. VIII y IX.

Galindo II Aznárez, conde de Aragón, motivó la llegada de cristianos a estas tierras y surgió un eremitorio en la cueva natural que hoy ocupa el Monasterio de San Juan de la Peña. Según cuenta la tradición, los eremitas zaragozanos, Voto, Félix y sus sucesores, pudieron vivir en la concavidad natural del llamado Monte Pano. Al parecer, estos anacoretas hallaron en la cueva los restos de Juan de Atarés, otro ermitaño, al que dieron entierro ante unos pequeños altares que se dedicaron a San Juan, San Julián y Santa Basilisa.

La fama e importancia de la primitiva comunidad de San Juan de Pano se debe al rey Sancho Ramírez y a la Orden de Cluny, que sustituyó en la misa el rito mozárabe por el latino en este monasterio y con el tiempo en el resto de la Península Ibérica, estamos hablando de los años centrales de la centuria del S. XI.

Iglesia mozárabe:

Por lo tanto es en la citada cueva donde se encuentra el origen del monasterio y donde se estableció una iglesia mozárabe que está formada por dos naves que desembocan en sendos ábsides, todavía es posible contemplar los restos de pintura que decoraban los ábsides. Esta iglesia está datada en el S. X, aunque los restos de pinturas citados corresponden al S. XII.

Sala de los Concilios:

Una de las estancias que más llama la atención al visitante por su denominación es la Sala de los Concilios que nos recuerda que aquí aconteció un concilio en tiempos del rey Ramiro I, aunque la mayoría de los autores sitúa en esta estancia el dormitorio de los monjes. Como curiosidad, en esta estancia se halla una fuente en la cual se castigaba a los malhechores con el mal del «gota a gota».

El Santo Grial:

También nos cuenta la tradición que el Monasterio de San Juan de la Peña albergó el legendario Santo Grial, procedente de Jerusalén hasta su traslado a la Catedral de Valencia donde está guardado en una copa de ágata en el interior de una capilla. Tras sufrir un incendio en el S. XVII, el monasterio fue abandonado y la comunidad se trasladó a un nuevo monasterio levantado montaña arriba, este último fue saqueado por Napoleón y sólo conserva la fachada realizada en estilo Barroco.

Panteón de Nobles:

A principios del S. XI, el Monasterio de San Juan de la Peña se convirtió en panteón real al ser enterrado aquí el primer monarca de Aragón, Ramiro I, posteriormente varios monarcas aragoneses y navarros realizarían cuantiosas donaciones para ser enterrados en este lugar.

Iglesia románica:

Este templo queda emplazado encima de la citada iglesia mozárabe, comienza a levantarse en el S. XI. En su ábside central encontramos una reproducción del Santo Grial, el cual como hemos comentado anteriormente estuvo custodiado en este monasterio hasta su posterior traslado a la Catedral de Valencia.

Claustro románico:

El claustro exterior es el elemento monacal que más llamará la atención del viajero por su máximo interés artístico, es la joya de San Juan de la Peña, una gran roca hace de visera, los capiteles de las columnas están magníficamente tallados con escenas bíblicas como el Génesis y la vida de Jesús, también se puede encontrar los típicos seres del bestiario medieval. Estos temas son los que encontramos en los capiteles que nos ofrecen las fotografías de abajo:

• La Creación de Adán y Eva.
• Tentación de la serpiente.
• La Expulsión del Paraíso.
• La Anunciación.
• Comunicación a San José de la Huída a Egipto.
• Caín dando muerte a Abel.
• Representación de San Juan en la cárcel.
• Epifanía.
• Tentación del diablo a Jesús.
• La pesca milagrosa en el Lago Tiberiades,
• Bodas de Caná, conversión del agua en vino.
• Jesús perdonando a la mujer adúltera.
• Resurrección de Lázaro.
• Entrada de Jesús en Jerusalén el Domingo de Ramos.
• Última Cena.
• Prendimiento de Jesús.

Capilla de San Victorián:

Junto al claustro encontramos la Capilla de San Victorián, considerada como una de las mejores muestras del gótico tardío en Aragón, fue levantada en el S. XV y recibe esta denominación en honor a uno de los cinco abades que aquí fueron enterrados.

Capilla de San Voto:

Se trata de otra de los dos capillas claustrales que presenta el conocido claustro románico, esta estancia fue levantada en el S. XVII y en ella es de destacar su cúpula con la correspondiente linterna. El acceso a la capilla se realiza por un interesante ingreso de estilo neoclásico.

Fotos del Monasterio de San Juan de la Peña