Laocoonte y sus hijos

Laocoonte y sus hijos

Vista frontal del Laocoonte y sus hijos, Museo Pío Clementino, Museos Vaticanos

Laocoonte en la mitología griega era un sacerdote de Apolo Timbreo en la ciudad de Troya. Se casó con Antíope con la cual tuvo dos hijos, Antífates y Timbreo, aunque también aparecen con los nombres de Etrón y Melanto. Laocoonte sacó la cólera de Apolo al unirse con su mujer ante la estatua que estaba consagrada a dicho dios, lo cual constituyó un sacrilegio.

El sacerdote se opuso a que los troyanos introdujeran el caballo de madera, debido a que sospechaba la trampa que podía contener. Estando formulando esta advertencia, surgieron del mar dos monstruosas serpientes que atacaron a sus dos hijos. La tradición ha conservado el nombre de estos dos reptiles que al parecer se llamaban Porcia y Caribea.  Laocoonte acudió a defender a sus hijos y fue también envuelto por los monstruos, por lo que perecieron inevitablemente los tres.

Laocoonte predijo la destrucción de Troya por el caballo de madera, pero los troyanos interpretaron por error su muerte como un castigo de Atenea y desoyeron la profecía.

Comentario del Laocoonte y sus hijos

La fotografía nos presenta el grupo escultórico griego de la muerte de Laocoonte y sus hijos, obra de Agesandro, Polidoro y Atenodoro. La cronología de la pieza hay que situarla en el S. I d. C. La obra fue encontrada en el año 1506 y se llevó al Vaticano por orden del papa Julio II. Las esculturas corresponden al período helenístico y a la Escuela de Rodas, ha sido objeto de algunas restauraciones, una de ellas realizada por Miguel Ángel.

El grupo escultórico está tallado en un solo bloque de mármol, podemos contemplar cómo transmiten un extraordinario dramatismo, reflejado en la expresión de los rostros y en el movimiento. Los cuerpos de las figuras se retuercen y los músculos se hinchan. Laocoonte aparece representado como un hombre maduro, musculoso y de mayor tamaño que sus dos hijos. La obra se conserva en el Museo Vaticano y reúne todas las características del Helenismo tardío y también del arte barroco, sirvió de inspiración a numerosos artistas de épocas posteriores.