Disfruta de este recorrido que nos llevará por algunas de las murallas de España que mejor se conservan
Murallas de Albarracín
Entramado defensivo con secciones que abarcan desde el S. XI al XV
El dominio de la técnica arquitectónica también se puso a disposición de la estrategia defensiva en el caso de las murallas erigidas por los romanos, árabes y cristianos en la Península Ibérica. Todavía hoy se pueden admirar un gran número de murallas en España que de manera admirable han solventado el paso del tiempo e incluso han sabido demostrar su utilidad defensiva siglos después de haberse construido. La fotografía nos ofrece una vista parcial de Albarracín (Provincia de Teruel), considerado como uno de los pueblos más bonitos de España, al fondo de la imagen aparece su muralla que fue levantada en la época árabe aunque en el S. XV fue reconstruida.
Morella, una ciudad amurallada
El topónimo de esta población castellonense hace referencia a su espléndida muralla
Morella impresiona desde tiempos inmemoriales a todos los viajeros que se han acercado hasta ella. Los 3 kilómetros que suman el perímetro total de sus murallas hacen que parezca una especie de ciudad castillo. Dentro de sus murallas, Morella ofrece un interesante entramado urbano medieval y un magnífico patrimonio histórico-artístico, el cual queda encabezado por su monumental iglesia arciprestal dedicada a Santa María la Mayor.
El Cerco de Artajona
Uno de los recintos defensivos de época medieval más interesantes de Navarra
El imponente Cerco de Artajona se nos presenta como una de las fortalezas medievales que mejor se han conservado en Navarra. Debido a su importancia ostenta la categoría de Monumento Histórico Artístico. Al parecer, sus obras de construcción debieron comenzar hacia el año 1085, en ellas participaron los canónigos regulares de San Saturnino de Toulouse. En la actualidad el Cerco de Artajona conserva un total de nueve torres prismáticas con almenas aunque en su día llegó a contar con catorce.
Murallas de Lugo
El recinto amurallado mejor conservado de la Antigua Roma
Desde tiempos remotos, la ciudad de Lugo fue apreciada por diferentes pueblos, entre ellos los romanos que encontraron en el lugar unas magníficas fuentes termales. Precisamente fueron los romanos quienes se encargaron de alzar una de las más impresionantes murallas de España con sus nada menos que seis metros de grosor y 10 metros de altura por término medio. Dentro de estas inexpugnables murallas surge una bellísima ciudad señorial con agradables plazas y calles para disfrutar del paseo.
Murallas de Ávila
Su perfección hacen de ellas el mejor recinto fortificado medieval de Europa
La ciudad de Ávila goza de fama por ser la capital de provincia española que se encuentra a una mayor altitud sobre el nivel del mar (1131 metros). Además de este dato geográfico, Ávila es conocida por presentar una de las más perfectas murallas de España debido a su envidiable y magnífico estado de conservación. Al parecer, nos encontramos ante la muralla medieval mejor conservada de toda Europa. Esta muralla fue construida en el S. XI y todavía presenta un total de 90 torres. Uno de los tramos de la Muralla de Ávila está formado por el espectacular ábside de la Catedral, toda una joya de la arquitectura gótica en España.
Murallas de Urueña
Interesante entramado defensivo medieval en la provincia de Valladolid
Nos encontramos ante uno de los mejores ejemplos de murallas de la provincia de Valladolid. La Muralla de Urueña fue construida entre los S. XII y XIII, de esta época conserva el 80% de su estructura. El tramo que más nos impresionó es el que corresponde a la llamada Puerta del Azogue, ingreso que se localiza en el parte septentrional de la muralla. Uno de los mejores lugares para contemplar la grandiosidad de esta muralla es desde el entorno de la Ermita de Nuestra Señora de la Anunciada, una joya del románico lombardo.
Murallas de Daroca
La tercera muralla más extensa de España
Daroca posee una de las más sorprendentes murallas de España, de hecho, por la longitud de su perímetro, son las terceras de España. Daroca puede presumir de ser una ciudad amurallada con nada menos que 116 torreones que parecen proteger un magnífico patrimonio monumental donde no faltan iglesias y casas señoriales que nos evocan a su glorioso pasado medieval. Es muy recomendable dar un sosegado paseo por su Calle Mayor y posteriormente disfrutar de la gastronomía local que puede ser acompañada por los renombrados vinos de Cariñena.
Muralla de Segovia
Una de las murallas más impresionantes de España, declarada Patrimonio de la Humanidad
Segovia puede citarse como una de las ciudades mejor emplazadas de Castilla. Su centro histórico se encuentra coronando una gran mole rocosa que se encuentra circundada por los cauces de los ríos Eresma y Clamores. Adaptándose de manera magistral al terreno se alza la Muralla de Segovia que todavía conserva un perímetro 2.250 metros. La mayor parte de la fábrica de esta muralla está datada entre los S. XI y XII.
Murallas de Girona
Construcción con secciones que se remontan al período carolingio
Girona es sin duda alguna una de las ciudades más bellas de Cataluña, todavía conserva un buen tramo de muralla que en un principio fue erigida por los romanos y posteriormente serán reforzadas en el período carolingio y siglos posteriores. En el S. XIX, parte del perímetro de las murallas sufrieron los estragos de los siete meses de asedio de las tropas francesas. Aún así, hoy es posible quedar asombrado por este recinto amurallado. Es muy aconsejable recorrer el paso de ronda de las murallas de Girona ya que desde allí se obtienen las mejores vistas de la ciudad.
Un pueblo amurallado repleto de encanto
Alarcón, provincia de Cuenca
Alarcón es un encantador pueblo fortificado que ha sabido conservar a la perfección su recuerdo medieval. Las murallas de Alarcón impresionan al visitante por sus tres recintos defensivos. Cabe recordar que Alarcón surgió en la parte más alta de un promontorio rocoso que se asoma al Júcar, el segundo por su longitud de los ríos españoles que desembocan en el Mediterráneo. Alarcón jugó un papel protagonista en la Reconquista debido a su importante posición estratégica, tras un asedio de nueva meses, el rey Alfonso VIII conquistó esta ciudad en el año 1184.