Infancia de Baco

Infancia de Baco

Relieve Romano

Este bellísimo relieve romano se conserva en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid, la pieza procede de los Estados Pontificios y está fechado entre los S. I y II d.C. Representa una escena de la infancia de Baco, un dios romano equivalente al Dioniso griego. El nombre de esta deidad procede del epíteto Bakjos del dios griego, que penetró en el Lazio en el S. III a. C. y se fundió con Liber, el dios autóctono de aquella región.

Como cuenta la mitologia, Baco era hijo de Zeus y la ninfa Sémele, hija del rey Cadmo de Tebas. Recordemos que Zeus fue infiel a su esposa Hera, de esta infidelidad nació Baco. Hera celosa, sugirió a Sémele con perversidad que se empeñase en ver a su amante en todo su poder. Como Zeus en el momento de su arrebato pasional le había prometido el primer don que pidiera, no tuvo más remedio que mostrarse rodeado de tempestades. La ninfa Sémele cayó fulminada, era el sexto mes de gestación. Después, Zeus sacó a su hijo del vientre de Sémele y lo cosió a uno de sus muslos, cuando nació el pequeño, lo entregó a las ninfas de Nisa, Sileno, hijo del dios Pan, se encargó de la educación de Baco.

El relieve nos muestra a Sileno cuidando de Baco. Sileno es el hombre que aparece desnudo en el centro de la composición. Baco mira con atención un racimo de uvas que porta una de las ninfas que lo cuida. Arriba a la izquierda, aparece representado un sátiro y junto a él hay un cuadro que muestra a un hombre togado, quizá se trate del comitente de la obra. En la parte inferior izquierda hay otra ninfa que procede a sacar algo de un recipiente.