Ermita de Santa María del Campo de Navascués

La Ermita de Santa María del Campo de Navascués

Ábside de la Ermita de Santa María del Campo de Navascués, una joya del románico rural de Navarra

La Ermita de Santa María del Campo es uno de los monumentos más interesantes de Navascués, un municipio navarro de aproximadamente 150 habitantes que se halla situado a 61, 4 km al oeste de Pamplona, en la Merindad de Sangüesa (Navarra), junto a la orilla izquierda del río Salazar. Nos encontramos en el extremo meridional del Valle de Salazar el cual se encuentra rodeado por las Sierras de Illon, Ustes y las estribaciones de Areta, estas montañas están pobladas por frondosos bosques de pinos, robles, hayas e incluso encinas dependiendo de la altitud y la orientación.

Para llegar hasta Navascués hemos de tomar la carretera NA-178 que une las poblaciones de Lumbier con Ezcároz. Precisamente la Ermita de Santa María del Campo se encuentra junto a esta carretera a un kilómetro del caserío de Navascués en dirección hacia Ochagavía. Esta iglesia, levantada en el S. XII, está considerada como uno de los testimonios de románico rural más interesantes de Navarra, en ella puede comprobarse la notable influencia artística que ejerció la Catedral de Jaca, uno de los grandes hitos del románico de España. La ermita cumple en la actualidad con las funciones de capilla del cementerio, aunque cabe mencionar que en su día fue la iglesia parroquial de Navascués.

El Almiradío es una demarcación administrativa sobre la que ejercía su oficio un tenente o almirante que eran nombrados por el rey de Navarra. Actualmente tan sólo existe el de Navascués. Antiguamente presentaba su sede en la iglesia de Santa María del Campo y posteriormente fue trasladándose hasta el cerro que en la actualidad ocupa el pueblo.

Descripción de la obra

Lo más llamativo de la Ermita de Santa María del Campo es su armonioso ábside con forma de hemiciclo, el cual va precedido de presbiterio. En la parte central del ábside se abre un vano con forma de arco de medio punto muy similar a los que aparecen a cada lado de la sección presbiterial. La iglesia consta de nave única de tres tramos, sobre el primer tramo de la misma se eleva un recio campanario de forma prismática que se culmina con un tejado a dos aguas. En los lados norte, sur y este de la torre se abren unas interesantes ventanas dobles con parteluz que presentan capiteles con temática vegetal.

En el costado meridional del templo se abre una bellísima portada que se articula mediante dos arquivoltas con forma de medio punto que rodean a un tímpano que queda presidido por un crismón trinitario. La arquivolta interior presenta un grueso baquetón y la exterior está decorada con el típico taqueado jaqués. Los capiteles que encontramos en esta portada son muy sencillos y actúan a modo de ménsulas al sustentar el dintel.

Recomendamos centrar la atención en la treintena de canecillos que aparecen sujetando el alero del ábside, en ellos se puede apreciar un amplio catálogo iconográfico que abarca desde representaciones animales, saltimbanquis o incluso a un hombre con un orinal. Algunos autores relacionan estas pintorescas figuras con las que aparecen en la llamada Puerta Speciosa del Monasterio de San Salvador de Leyre. El interior del templo es muy sobrio y en él se custodia una pila bautismal del S. XVI, lo más llamativo es la gran altura que presenta la nave.

Alrededores:

En las cercanías de Navascués encontramos la impresionante Foz de Benasa con una piscina fluvial, también es recomendable dar un paseo siguiendo la ruta de los dólmenes que discurre por el sureste del municipio. Por último, si se tiene tiempo, conviene subir a las cimas de San Quirico o el Borreguil desde donde se obtienen unas interesantes vistas panorámicas.

Fotos de la Ermita de Santa María del Campo de Navascués