Castillo de Cuzcurrita

Castillo de Cuzcurrita

Vista del Castillo de Cuzcurrita de Río Tirón, La Rioja

Entre los S. XIII y XV, La Rioja fue un territorio fronterizo entre los reinos de Castilla y Navarra. Por ello, abundan las construcciones de tipo defensivo.

Diferentes tipologías de castillos de La Rioja:

• Torres-fuerte: Torremontalbo.
• Castillos levantados en lo alto de un cerro: Clavijo, Davalillo o San Vicente de la Sonsierra.
• Palacios fortificados: Sajazarra, Agoncillo, Leiva, o Cuzcurrita de Río Tirón.

Podemos decir que La Rioja es una de las zonas de la Península Ibérica con mayor densidad de castillos. Cuenta con más de un centenar, aunque muchos de ellos presentan un avanzado estado de ruina. Hay provincias españolas que tienen más castillos, pero hay que tener en cuenta la pequeña superficie de La Rioja con aproximadamente 5.045 km2.

La Rioja se compone de dos comarcas bien diferenciadas, Los Cameros y La Rioja propiamente dicha. Esta última rebasa los límites de la provincia por el sur de Álava y una pequeña parte de Burgos. Los Cameros fue un territorio afín a los intereses de Navarra y sus castillos de carácter defensivo fueron levantados por los distintos señoríos. Mientras, en la comarca de La Rioja, sus castillos responden al tipo de palacio fortificado que fueron construidos por los miembros de las familias de la nobleza en el S. XV.

Descripción del Castillo de Cuzcurrita

Se trata de una construcción de estilo gótico, responde a uno de los castillos más bellos y mejor conservados de La Rioja. El edificio representa a la perfección la típica arquitectura palaciega del S. XV que se estaba levantando en tierras del nordeste de Castilla y País Vasco. El Castillo de Cuzcurrita está formado por un alto cinturón de murallas, en el medio se alza la imponente Torre del Homenaje, de perfecta sillería y carácter defensivo por su escasez de vanos. La torre se corona con por un parapeto almenado y amatacanado donde se disponen unas torrecillas circulares en cada esquina. Junto al castillo aparece un antiguo molino.

El topónimo:

El primer documento histórico que menciona a Cuzcurrita aparece en una cédula real del año 1062 emitida por el rey Sancho IV de Peñalén, último monarca de Pamplona y Nájera, en favor de Sancho Álvarez de Coscorrita que se hizo con la propiedad de varias casas realengas de Zarratón. El curioso topónimo de Cuzcurrita puede derivar de un primitivo euskera, según sostienen algunos autores procede de la desaparecida palabra euskérica «cuzcuz» que significaba bellota, en la actualidad «ezkur».

Otras posturas mantienen que el topónimo es de origen latino y procede de «coscogare» o «coscoiar» que al parecer es un árbol de la familia de las encinas. No muy lejos de Cuzcurrita existen poblaciones con este topónimo como Cuzcurrita de Juarros (Burgos) o Cuzcurritilla, esta última localidad se encuentra situada muy cerca de Haro.

El topónimo de Cuzcurrita también aparece en la vida de Santo Domingo de Silos, santo riojano que realizó un milagro a un cautivo llamado Servando, natural de Cuzcurrita, según figura en las crónicas. La villa de Cuzcurrita perteneció a los Duques de Frías, condes de Haro y a la vez condestables de Castilla.

Fotos del Castillo de Cuzcurrita, La Rioja