Diosa Juno

Diosa Juno

Escultura de la Diosa de Juno de época romana, conocida como la Providencia y restaurada con los atributos de Urania

Juno era una de las divinidades más importantes del panteón romano. Formaba parte de la Tríada Capitolina junto con Júpiter y Minerva. Esta deidad era hija de Saturno y Ops, y esposa y hermana de Júpiter, equivale a la diosa Hera de la mitología griega.

Según Homero, fue cuidada en su infancia por Océano y Tetis, más tarde vino a ser la esposa de Júpiter sin que sus padres tuvieran conocimiento de ello. Otros mitógrafos consideran que fue devorada por su padre al nacer junto con sus hermanos, pero su padre acabaría devolviéndole a la vida.

En la Ilíada se la rodea del respeto de todos los demás dioses olímpicos junto con su esposo, el cual sigue sus consejos y le confía sus secretos. Homero la describe como poco amable y desapacible en el trato. Con Júpiter tuvo a Marte (Ares), Lucina (Hebe) y Vulcano (Hefesto).

Al parecer fue la única diosa del Olimpo casada, por lo que se la representa como la diosa del matrimonio y de los nacimientos. En la Ilíada suele ser representada en una carro que es tirado por dos caballos.

El Juicio de Paris la hizo hostil a los troyanos y en la Guerra de Troya favoreció a los griegos. Persiguió ferozmente a todos los hijos que su marido había tenido con mujeres mortales, de ahí su enemistad con Dionisos (Baco), Heracles (Hércules) y otros.

Escultura:

La diosa Juno fue representada a lo largo de la Historia del Arte como una mujer de aspecto majestuoso y solemne, de edad madura, muy bella con ojos grandes y expresión serena que infundía respeto, tal y como se nos presenta en la fotografía, en la cual podemos observar una representación de la diosa con su característica diadema. Se trata de una escultura de época romana que actualmente forma parte de la magnífica colección de arte clásico del Museo del Louvre.