Arpías, Capitel Románico

Arpías, Capitel Románico

Claustro de Santo Domingo de Silos

Arpías, Capitel románico

Las arpías que nos muestra la fotografía pertenecen a uno de los capiteles situados en la galería occidental del claustro bajo del Monasterio de Santo Domingo de Silos. Este capitel fue realizado por el segundo taller silense que participó en los últimos años del S. XII. Al parecer, trabajó en él la misma mano que realizó el relieve de la Anunciación.

El capitel nos muestra a unas arpías afrontadas cuyo cuello es atrapado por las ramas de un árbol que aparece en el centro, la escena hace referencia al triunfo del bien sobre el mal. Las arpías del capitel presentan rostros masculinos y femeninos, cuerpo de ave, patas de cabra y cola de reptil. Los rostros de las arpías muestran un gran realismo dejando el hieratismo propio de las arpías del primer taller silense, incluso sí nos fijamos podemos apreciar la vena yugular en sus cuellos.

Este realismo es una de las diferencias que encontramos entre el primer y segundo taller de Silos. Las tallas son diferentes aunque se continúa con la misma iconografía, con el segundo taller lo lineal cede paso al volumen, al igual que lo simbólico desaparece para dar la bienvenida a un mayor naturalismo. En el claustro alto existe una copia de este capitel realizado por un escultor más modesto.

Las Arpías en la Mitología

Las arpías son un animal fantástico que presentan cabeza humana, generalmente de mujer aunque en el románico, a partir del año 1200, aparecen algunas con rostro masculino. Su cuerpo es de ave, las pezuñas son de cabra y la cola es de reptil. Las arpías ya eran representadas en Egipto, en esta cultura simbolizaban el alma separada del cuerpo. En la cultura griega eran un símbolo eminentemente funerario, según la mitología clásica, las arpías eran hijas de Taumante y habitaban una cueva ubicada en la isla de Creta. Al parecer su nombre viene a decir «las que raptan». En el arte medieval las arpías son frecuentemente representadas y su simbolismo es negativo, en realidad son una alegoría de los vicios.

Fotos del Capitel románico con Arpías de Silos